Si entraras por algún casual en una habitación que concediera todos tus deseos al instante, ¿podrías físicamente salir de la habitación? O, enfocando la pregunta de otra manera, ¿la propia habitación te dejaría marcharte? Porque tus ganas de marcharte son, técnicamente, un deseo.
Pues bien, esta paradoja tan rallante ha aparecido ya en dos series supuestamente infantiles que he visto recientemente (el año pasado). Vamo a vé como han intentado resolverlo. Aunque puede que haya spoilers.
Gravity Falls
Mabeland es una prisión que adopta la forma de una tierra ideal en la que todo lo que desea Mabel se hace realidad, con el propósito de confinarla allí para siempre. Cuando su hermano Dipper entra allí para rescatarla, llega al palacio de Mabel, pero se va del palacio para no ser tentado de permanecer en el mundo real/imaginario de Mabeland y encontrar una manera de escapar.
Aquí es cuando las cosas se ponen turbias. El amor platónico de Dipper (que había entrado junto a él a Mabeland) le propone permanecer allí, pero Dipper se niega y esta se convierte en un montón de gusanos procesionaria. A partir de ahí, la totalidad de Mabeland se pone en contra de Dipper y los habitantes del lugar convencen a su presidenta Mabel a celebrar un juicio contra Dipper en el que este la convence, a élla y a los otros que le acompañaban y que entraron a la prisión, de que vuelvan al mundo real. Pero, ¿no era precisamente eso lo que quería Dipper? Encontrar motivos de peso para convencerse a sí mismo y a los demás de abandonar ese lugar. ¿Cómo sabemos que la prisión no ha cumplido su deseo y que Dipper no sigue encerrado en Mabeland?
Steven Universe
En este caso el asunto se vuelve mucho más complejo porque se dan varias soluciones al problema y por el propio planteamiento de la habitación:
Revelan la existencia de la paradoja: Cuando Steven desea abandonar la habitación, vuelve a su ciudad, pero la gente tiene un comportamiento monótono, casi robótico. Incluso su padre no parece el mismo. Al morder un donut, este desaparece .¿Por qué? Porque la habitación no está programada para simular comida (debido a cierto factor que es spoiler fuerte de la serie). Entonces Steven se da cuenta de que sigue en la habitación.
La habitación tiene "inteligencia": Llegado a este punto, la propia habitación pregunta a Steven qué desea. Steven le pide dejarlo marchar y esta acepta, pero volvemos a caer en la pregunta de antes. En otro momento de la serie se llega a un momento de complicación tal que Steven vuelve a entrar, esta vez acompañado, y al cabo de un rato da una orden contradictoria a la habitación ("déjame en paz"). La habitación llega a un punto de indecisión tal que coarta a Steven para que confiese algo que deseaba revelar a la otra persona pero que no se atrevía a decir. Aunque la confesión fuera una tontá mu gorda, podemos ver cuan lejos puede llegar la habitación para cumplir los deseos de Steven aunque sean complejos, latentes o secretos.
La... ¿solución?
Lo más cercano a una solución se ha obtenido en Steven Universe, y no sé hasta qué punto se puede considerar así ya que no es una manera de escapar, sino una reducción de la "firmeza" de la habitación. El cuarto secreto de Steven no está pensado como una prisión, así que, si Steven anhela decididamente irse, sería lógico pensar que la habitación destinada a cumplir sus deseos le deje marchar. A pesar de esto no se puede estar completamente seguro, ya que igual la habitación pretende seguir cumpliendo los deseos de Steven de manera que este no note su intervención, o que la habitación caiga también en la paradoja. En ambos casos, tendría que simular la realidad de Steven empleando todos los recursos a su alcance y mejorándose a sí misma para adoptar protocolos tan complejos como el de simularse a sí misma en una versión anterior para que Steven pueda seguir creyendo que está fuera de la habitación y que puede volver a entrar cuando quiera.
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