Ya que
estamos por fechas de Halloween y todo eso,
voy a hablar de las diferencias entre el Frankenstein libro y lo que sea
que sale en las películas y en los disfraces de dar miedo, porque se parecen lo
mismo que un huevo a una castaña.
Empezaré
por las más “básicas” (por llamarlo de alguna manera) y avisaré cuando vengan
los spolules importantes.
Frankenstein no es el “monstruo”: Frankenstein fue el 100tífico
que creó a la criatura, porque
llamarle monstruo está muy feo, más feo que lo que ya es el pobre.
No es de miedo: Es una novela dramática un poco tétrica por
un lado y un poco jodidilla por el otro, pero no es de miedo.
Frankenstein no es un científico loco: Es un hombre con buenas
intenciones que está realizando un experimento (muy desagradable y relativamente poco ético) pero que sería
un gran descubrimiento científico.
La criatura no es un bicho amorfo: La corta descripción que se
hace de él en el libro se podría resumir así: “Sería muy guapo si no fuera un
cadáver andante”. Si queréis verlo mejor poned “Frankenstein Luke Goss” en
google imágenes.
La criatura no es tonto del culo: Es de los personajes más listos
y profundos del libro. Seguiré hablando de este tema más delante.
Ahora
sí. A partir de aquí vienen los SPOILERS. No son graves pero te adelantan
parte del primer tercio y un poco del segundo. Así que si sigues leyendo y te
arruinas la sorpresa es culpa tuya porque yo ya lo he avisado.
La
historia tiene tres protagonistas: Lo que pasa es que el capitán Walton sólo
hace de narrador de la historia.
La
figura del “Doctor Frankenstein” es completamente falsa: Victor Frankenstein es un chaval
de 17 años (da vida a la criatura con 18 o 19 años creo, menos de 20 seguro) que
ha tenido una infancia y juventud tremendamente felices y que estudia el grado
universitario de Filosofía Natural, lo que actualmente se conoce como Ciencias
Naturales (sí, había una carrera de Ciencias Naturales en general en esa
época). Tras hincharse a estudiar cree descubrir la forma de revivir un cuerpo
mediante electricidad, es decir, que empieza el experimento con la bondadosa intención
de evitar o por lo menos retrasar la muerte humana.
La
escena de “ESTÁAAA VIIVOOO” también es muy falsa: La maquinaria no se describe en ningún
momento y el capítulo da mucha risa: Tras seis meses de husmear en panteones
para conseguir cachos de cadáveres y ensamblarlos, va el tío y se asusta cuando
la criatura abre los ojos. Tanto que huye de su propia casa a toda prisa y acaba con
estrés postraumático y todo.
La
criatura no mata a una niña en un río: Es más, la salva de ahogarse y se lleva un disparo en el hombro de recompensa, pobrecito.
La
criatura sabe hablar bien: Y habla en un refinado francés (no es puta broma, en serio).
La
criatura no es gilipollas versión extendida: Un tercio del libro es él reflexionando
sobre su vida. Es el personaje más fino en un libro en el que todos hablan como
si fueran de la RAE (A pesar de que no se hace pesao ni pedante). Es un ávido
lector dentro de los pocos libros que puede conseguir, muy simpático, elocuente
y vegano (juro que tampoco es broma esto último). Aunque lo de “muy simpático”
se vuelve muy debatible conforme va avanzando la historia.
Frankenstein
y su criatura no se llevan (nada de) bien: La criatura culpa a Frankenstein de haberle
creado tan feo y gigantesco que nadie le quiere y todos huyen de él o le atacan por miedo, "Si alguien me diera amor, yo se lo devolvería multiplicado por cien", entre
otras putadas como abandonarlo. Así que llegado a un punto se llena de rabia y
mata al hermano menor de Victor. Y ahí empieza la parte dramática y jodidilla
del libro.